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‘Next Generation España’: siete retos de la gestión de los fondos de recuperación europeos

Análisis del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia español realizado por eco-union, para el informe Reaching for a Green Recovery, publicado por CAN-E/Bankwatch.

La crisis del COVID-19 ha puesto en evidencia nuestra dependencia de la naturaleza y la necesidad de apostar por una recuperación ambiental. En este sentido, el gobierno español ha diseñado el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia, estrategia para canalizar los fondos Next Generation europeos, formado por 102 propuestas de reforma y 110 inversiones integradas en 30 componentes temáticos.

El plan pretende contribuir a alcanzar la neutralidad climática en 2050, abordando desde la movilidad sostenible y el desarrollo urbano sostenible hasta los programas de transición justa, la transformación de la industria española, la digitalización, la agenda rural y la modernización de la administración pública. Pero ¿conseguirá el plan una transformación ambiental real a corto, medio y largo plazo de la economía española? ¿Qué aspectos faltan o se deberían mejorar para acelerar esta urgente y necesaria transición ecológica ?

La asociación eco-union analiza dicho plan en el informe Reaching for a Green Recovery, publicado por CAN-E/Bankwatch; y extrae siete recomendaciones sobre ámbitos importantes que no están contemplados en la estrategia y que son necesarios para implementar el pacto verde europeo y la transición climática en España. A continuación, presentamos un breve resumen, pero puedes encontrarlas todas descargando el informe aquí

1. Más inversión para la transición ecológica del sector agrícola. El plan no desarrolla suficientemente las reformas e inversiones necesarias para una transición ecológica justa del sector agrícola y reducir así, sus impactos adversos sobre el clima (14% de las emisiones de C02) y la biodiversidad. España debería invertir masivamente para hacer frente a la contaminación del suelo, agua o y aire debido al nitrógeno de los fertilizantes y el metano del ganado, según se explica en el documento. 

2. Impulso a la movilidad ferroviaria y el transporte público. Dado que la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero de España es el transporte (27%), en el informe se apunta a que el plan de recuperación debería ser más ambicioso a la hora de apoyar y promover sistemas de movilidad de bajas emisiones. El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) ofrece un apoyo significativo al despliegue de la movilidad eléctrica, mientras que las inversiones en ferrocarril y transporte público descarbonizado no son lo suficientemente ambiciosas.

3. Hidrógeno y energías renovables. Debido a su alto complejidad, baja eficiencia y elevado coste, el hidrógeno, generado por energías renovables, sólo se debería utilizar cuando es la única opción tecnológica posible, en el caso del sector de la aviación y del transporte marítimo.

4. Reformas en la fiscalidad verde. El plan de recuperación no incluye reformas sustanciales en materia de fiscalidad verde para incentivar las practicas respetuosas con el medio ambiente tal y como se expone en el análisis de eco-unión. Las únicas medidas incluidas son un impuesto de circulación y otros impuestos sobre los plásticos y los residuos, que se debería extender a otros sectores y actividades contaminantes para equipararse con la situación de los otros países europeas.

5. Fomento de la economía circular. El plan incluye principalmente medidas sobre el reciclaje de residuos en lugar de centrarse en la prevención. Se debe prestar más atención a la reducción de residuos y establecer objetivos ambiciosos para impulsar la economía circular en todos los sectores de la economía. Las inversiones correspondientes pueden incluirse en la programación de los demás fondos de la UE.

6. Protección de la biodiversidad. Preocupa que la rápida transición energética pueda perjudicar la protección de la naturaleza y la biodiversidad causado por una mala planificación del uso del suelo, que pueda llevar al despliegue de tecnologías de energías renovables en zonas protegidas, productivas (tierras de cultivo) o en disputa. Esto requerirá un control especial durante la fase de aplicación del plan. Además, en el informe se recomienda publicar una Estrategia Nacional de Autoconsumo y establecer objetivos claros y ambiciosos en esta materia y en las comunidades energéticas.

7. Apostar por la transparencia. Es necesario garantizar que todas las inversiones del plan de recuperación y reformas se apliquen con el máximo nivel de transparencia y en consulta con todas las partes interesadas. Se debe considerar el establecimiento de mecanismos y procesos formales de supervisión para garantizar que dicho compromiso sea efectivo.

 

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